Según sus tíos el joven asesinado iba a comenzar la secundaria en un liceo de Plan de Manzano. Van 193 niños y adolescentes asesinados en la Gran Caracas
NATALIA MATAMOROS | FOTO OSWER DÍAZ M / EL UNIVERSAL
Después de almorzar con su esposa e hijos en su casa en Colinas de Plan de Manzano, Julio Miranda se acostó. Solía descansar en las tardes y en esta oportunidad su cónyuge salió a casa de una vecina para arreglarse las uñas de las manos.
Su hijo de 11 años se quedó en la sala terminando de comer y una vez que culminó fue a llevarle comida al perro. Cuando subía las escaleras, ubicadas al lado de la vivienda, el muchacho fue testigo de cómo un par de antisociales mataron a dos muchachos.
Horrorizado al ver la dantesca escena el joven corrió a refugiarse a la casa, pero uno de los sujetos involucrados en el doble homicidio le disparó. El padre del niño escuchó detonaciones y se levantó de la cama, avanzó unos pasos hacia la sala y vio que el niño corría hacia él pidiendo ayuda.
"No podía hablar casi, estaba ensangrentado y cuando el padre lo abrazó se desplomó. Le habían disparado en el abdomen y en el cuello. Desesperado lo llevaron a la Clínica Nueva Caracas. No dio tiempo de atenderlo, murió", relató Alberto Miranda, tío del niño asesinado. En julio el muchacho había culminado sus estudios de educación primaria en el colegio Federico Quiroz y se preparaba para comenzar la secundaria en un liceo de la zona.
"Por ser testigo de esos crímenes mataron a mi sobrino, no se sabe a dónde nos va a llevar esta ola indetenible de violencia, qué pasa con el patrullaje, hasta cuándo van a seguir matando a gente inocente. Ese niño era un ángel, una persona cándida, sin malicia. Era travieso como cualquier niño de su edad, pero no le daba dolores de cabeza a sus padres", expresó Gilberto Miranda, otro tío del joven, quien era el mayor de tres hermanos.
Ultiman a adolescente
La cifra de niños y adolescentes en la Gran Caracas continúa en alza. El sábado un muchacho de 16 años fue asesinado de un tiro de escopeta.
El joven estaba reunido con su familia en su casa en el callejón Caracas del barrio San José de Petare y escuchó cuando unos sujetos discutían. Se asomó a la ventana y le dispararon en la cabeza. Los sujetos que lo tirotearon se fueron del barrio.
Hasta la fecha 193 niños y adolescente murieron en circunstancias violentas en la Gran Caracas, de acuerdo con datos extraoficiales. En la última semana fueron ultimados nueve jóvenes que no llegaban a la mayoría de edad.
La mayoría de los asesinatos fueron cometidos por venganza y se suscitaron durante enfrentamientos. En otros casos los menores han quedado atrapados en la línea de fuego en tiroteos.
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