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10 de mayo de 2013

Se inyectó biopolímeros y no dijo nada. Murió a los 26 años (+Foto)


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La joven de 26 años estuvo en coma durante 11 días el en Pérez Carreño

ElUniversal.com

El malestar se pronunció y la joven decidió contarle a su mamá que el viernes no había salido para la costurera, tal y como le había dicho, sino que había ido a una reconocida clínica caraqueña a inyectarse biopolímeros en los glúteos.

Adriana Carolina Hernández, de 26 años, siguió con las náuseas durante todo el día sábado 27 de abril. No mejoró. A las 4:05 de la mañana del domingo se levantó porque tenía ganas de orinar y antes de llegar al baño se desmayó y nunca más despertó. Su mamá, Norys Yajaira García, y su hermana, la llevaron hasta el hospital Miguel Pérez Carreño. Ahí estuvo recluida en la Unidad de Cuidados Intensivos hasta el pasado miércoles, cuando falleció. Siempre, desde que ingresó, estuvo en coma. Permaneció inconsciente once días, hasta que ya no pudo respirar más.

"La sustancia que le inyectaron migró hasta los pulmones, nos explicó el médico que la trató en el hospital. Eso provocó una embolia pulmonar. Mi hija falleció a las 10 de la mañana en el Pérez Carreño", dijo Norys Yajaira, mientras esperaba en la morgue de Bello Monte a que los patólogos llegaran para le hicieran la autopsia al cuerpo.

Según explicó, efectivos del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas, adscritos a la División Nacional contra Homicidios, llevan la investigación del caso. De acuerdo a los que le dijeron a Norys en el centro de salud, su hija resistió muchos días. "Me dijeron que suelen llegar muertas. Que con mi hija, ya han atendido tres casos en ese hospital, pero los dos primeros no resistieron tanto. Me explicaron que el biopolímero hace que el músculo se ponga duro... endurece el pulmón o el cerebro, cuando migra para esas partes", agregó Norys.

Adriana, la joven fallecida, era comunicadora social y trabajaba como productora general en una compañía independiente que realizaba comerciales para televisión. Ya se había sometido a otros tratamientos estéticos.

Norys no quiso dar el nombre del médico, ni especificar el número del consultorio de la clínica donde su hija se puso las inyecciones. "Las investigaciones están bien adelantadas, y ya se descubrió que no es solo un consultorio donde colocan esas cosas, si no en varios. No queremos alertarlos para que de verdad se haga justicia", dijo Norys.

En números

Con la muerte de Adriana suman 15 las mujeres que han fallecidos en Caracas, desde 2011, por haberse sometido a un tratamiento estético, con biopolímeros o en lipoesculturas.

Según se pudo conocer, solo tres médicos y una falsa especialistas tienen medidas privativas de libertad por estar involucrados en alguno de estos casos. El Ministerio Público acusó al anestesiólogo Luis Alberto de La Cruz (81), propietario de la Clínica San Felipe, y al médico cirujano Carlos Zambrano Linares (51), por la muerte de Karina Sánchez Higuera (31), quien falleció momentos antes de que le practicaran una liposucción. Ellos están presos en sus casas y no pueden ejercer. A ellos se les señaló además por la muerte de Carolina Sánchez, de 35 años, ocurrida el 13 de julio 2012 en la misma clínica donde murió Karina.

Mercedes Elvira Betancourt, fue detenida en 2011. Ella ejercía sin ser profesional. Ya la habían capturado en 2010 pero la dejaron libre. Una mujer falleció por un tratamiento aplicado por ella, según la denuncia presentada.

Lidisay Galeno, la doctora que operó a la magistrada María Queipo, quien falleció por infección, permanece recluida en el INOF.


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