31 de agosto de 2014

Envió a su hijo a un plan vacacional del gobierno y lo halló muerto en una piscina

Un niño de 12 años se ahogó el pasado jueves en la piscina del hotel Aguas Calientes, en Ureña, donde asistía a un plan vacacional organizado por el Gobierno nacional. La madre notó que otros niños regresaron a sus hogares pero nadie le dijo nada sobre su hijo. Cuando lo fue a buscar encontró a los funcionarios del Cicpc sacando el cadáver de las piscina

Por Yaileth Argüelles / La Verdad

Christian Vieri Gamarra Daza, de 12 años, se ahogó el pasado jueves en la piscina del hotel Aguas Calientes, en Ureña estado Táchira, donde compartía con otros niños del barrio “Hugo Chávez Frías”, como parte de un plan vacacional organizado por el Gobierno nacional para estos días.

Taydalak Daza, madre del menor, relató a las afueras de la morgue que presintió la tragedia cuando notó que otros niños vecinos regresaron, pero su hijo no, según detalla una nota publicada en el diario La Nación.

La progenitora permitió que Christian participara en la actividad que fue coordinada por la Gobernación y promovido por los consejos comunales de cada sector para el disfrute de los niños y adolescentes de entre cinco y 16 años.

“Su papá llevó a Christian. Se quedó un rato con él, hasta que un recreador le dijo que se podía ir, que ellos se harían cargo de los niños”, contó sollozante la dama.

Daza aún desconoce cómo ocurrieron las cosas. “Yo no sé qué pasó. Un vecinito me dijo después que vio a un niño que se ahogaba, pero no se dio cuenta de que era Christian. Que hubo adultos que escucharon eso, pero nadie hizo nada”, declaró.

Afligida por lo ocurrido relató que a unos niños los mandaron desde el hotel, a pie; a otros los llevaron a sus casas en los jeeps. “A las 7 de la noche ya no podía con la angustia. Me fui para el hotel y allí vi a mi hijo, el Cicpc lo estaba sacando de la piscina. Cómo es posible que esto haya pasado”, se preguntó.

Indicó que el grupo del plan vacacional abandonó la piscina entre las 4:00 y 4:30 de la tarde. “Pero cómo, nadie vio a mi hijo cuando se ahogaba, o su cadáver, al ahogarse. Todos se fueron de la piscina y lo dejaron abandonado. Ni siquiera los encargados del hotel supieron darme explicación, no quisieron hablar conmigo. O sea, si yo no voy al hotel no me hubiera enterado de que mi hijo estaba muerto. No es justo”.

La víctima, de nacionalidad colombiana, era el tercero de cuatro hermanos y el único hijo varón.