En el surtido de gasolina sin cola y sin lector de TAG se transa el pago de 30 bolívares con el trabajador. Los usuarios reportan que por eso hay islas de los expendios que están cerradas para habilitar en la negociación acordada
Por Yasmín Ojeda / La Verdad
Los “bachaqueros” ya tienen estrategias con el combustible. Hacer cola está en la lista. Esperar hasta dos horas para cargar gasolina también. La negociación pasa con el bombero del surtido. Si la orden es abastecer tres bolívares por vehículo “sale la maraña”, acusa José Bastidas, transportista.
“Uno tiene que durar mucho tiempo en una cola echando gasolina. Si no mojáis la mano al bombero no te echan, con o sin chip pasa”, critica Bastidas ante la estampida de usuarios del servicio que tienen un negocio con los trabajadores de la estaciones. “Qué es eso que para tanquear hay que pagar 30 bolos”, cuestiona.
En Maracaibo hay estaciones que aún no tienen el sistema automatizado para el funcionamiento de la tarjeta de abastecimiento de gasolina. El plan piloto comenzó en Maracaibo con cinco de los 87 expendedores de combustible de PDVSA para frenar el contrabando y “bachaqueo”. Las colas desde el jueves se observan en los expendedores sin chip.
Bastidas explica que hay puntos de surtido en los que el tanqueo es bajo presión. Y es que al solicitar la carga de 100 litros autorizados “no tanquean completo. Ya no es normal. Son muchas cosas, hay estaciones que ya no trabajan o lo hacen medio día”, después tienen que hacer cola y luego “sale la maraña. Eso no puede ser”, rechaza.
Ramón Villalobos, usuario, lamenta la espera y las causas por las que se imponen medidas. “Esto es un tormento porque entre colas uno pierde tiempo. Hasta dos horas. Y al salir de una cola vas a entrar a otra por comida”.
El conductor asegura ser constructor en el municipio Mara. A la pregunta de por qué cargaba en Maracaibo y no en su jurisdicción respondió que los domingos “allá no hay ni una bomba funcionando”. La inoperatividad de los establecimientos lo obliga a movilizarse a expendios ubicados al norte de la capital zuliana.
La "maraña"
Los usuarios acusan que hay surtidoras que cierran una isla para transar el negocio. “Siempre dejan la primera fuera de servicio y si no quieres hacer cola tienes que pagar 20 o 30 bolívares”, sostienen. Las irregularidades apuntaron a las ubicadas en Belloso, Santa Lucía y La Fortaleza, vía a La Concepción.
La gerencia de Mercadeo Interno del Ministerio de Petróleo y Minería tiene un plan de acción contra el contrabando. Hay una sala situacional que evalúa la actividad de las estaciones. La revisión gira en 218 puntos. Maracaibo, Cabimas y San Francisco concentran la mayor presencia de surtidoras de gasolina.
“Ojalá que el chip dé resultado, pero creo que no, el 'bachaqueo' va a seguir igualito. Ya le están dando la vuelta para sacar más”. Jesús Alberto Reverlo. Conductor de Valle Frío
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