Danyel Jhoel Luengo, de 42 años, no permitió que le robaran su laptop. Siguió a los delincuentes y estos se devolvieron para matarlo. El penalista se desangró ayer a las 6.00 de la tarde en la avenida 3Y del sector San Martin. La Policía revisa las cámaras de seguridad de un centro comercial
Por Ana Karolina Mendoza / Foto: Odailys Luque / La Verdad
Con la cara pegada a la carretera se desangró Danyel Jhoel Luengo, de 42 años. Dos hampones le dispararon en el pecho y en la cabeza frente a un centro comercial en la avenida 3Y del sector San Martin. Las unidades de la Policía municipal de Maracaibo trancaron desde las 6.00 de la tarde la vía.
Los uniformados radiaron el hecho y pidieron una ambulancia que no se necesitó. El hombre balbuceaba sangre. José Luis Alcalá, director del organismo de seguridad, reconoció a la víctima en cuanto la vio: es un abogado penalista. Cuarenta y cinco minutos pasaron para conocer la identidad. Los inspectores de la Policía científica revisaron el cadáver, pero no tenía documentos en el pantalón negro que vestía, tampoco en la camisa.
Las pertenencias de Luengo quedaron adentro de un restaurante de comida colombiana. Los trabajadores fueron los únicos testigos del asesinato del jurista. Un atracador entró al establecimiento y sorprendió a Luengo por la espalda, mientras conversaba por teléfono. Intentó arrebatarle el computador portátil que guardaba en un bolso. Pero el hombre forcejeó con el delincuente, a quien describieron como "un muchacho delgado, de estatura media, de no más de 22 años".
El maleante salió del local con las manos vacías y detrás de él el abogado enfurecido. Este insultó al ladrón, mientras se alejaba en una moto con su cómplice; pero no avanzó 100 metros cuando retornó y accionó la nueve milímetros que portaba. Unas ocho detonaciones escucharon los clientes del centro comercial y al menos cuatro proyectiles alcanzaron a Luengo.
Los videos
Los primeros dolientes en llegar fueron un hermano de Luengo y su pareja. Él por poco se desploma, pero ella lo contuvo: "Cálmate, vamos a ver qué fue lo que pasó". Entraron al restaurante y conversaron con el comisario Alcalá. Pero antes se cercioraron que el muerto era Denyel, pues vieron estacionado el Mustang negro, placa AA011PN. Polimaracaibo había resguardado las pertenencias de la víctima.
De apoco llegaron familiares y amigos. José Sifontes, jefe regional de la Policía científica, también acudió al lugar del crimen. Hasta el cierre de esta edición veían los videos de seguridad del local. Los organismos de seguridad regionales peinaron ayer la zona en busca de los homicidas.
Con temor
"Abuelita, hoy nos vamos de la casa. Me da miedo que nos quedemos ahí. Vamos a estar solas", repetía una hermana de Danyel Luengo mientras conversaba por teléfono. Trascendió que el abogado no tenía pareja y que era propietario del escritorio jurídico Alianza, ubicado en el piso 3 del centro comercial Salto Ángel. Frecuentaba el restaurante de comida colombiana donde intentaron asaltarlo. 4 proyectiles penetraron el pecho y la cabeza del jurista. Murió en la calle
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